
Escribo con profunda tristeza al enterarme hace un rato del fallecimiento de nuestro querido Juan Llach durante un Zoom de uno de nuestros grupos de trabajo; hicimos un alto en la tarea al enterarnos de la noticia y se generó un lindísimo diálogo en el cual todos lo recordamos con un enorme cariño y respeto profesional y personal.
Conocí a Juan en 1981, cuando él fue mi profesor de Economía Argentina en tercer año de la carrera de economía en la UCA. La vida después hizo que nuestros caminos se entrecruzaran en distintos ámbitos y contextos; durante su gestión pública en los 90’s, trabajando juntos en Coloquios de IDEA y en eventos de ACDE por esos tiempos, entre tantos otros.
En el 2003 cuando creamos RAP, al poco tiempo conformamos lo que llamamos un “Consejo Asesor” del cual Juan fue uno de sus primeros miembros. Desde ese ámbito nos apoyó y acompañó en forma desinteresada y comprometida con su experiencia, visión y análisis durante muchos años para ayudarnos en la construcción que estábamos encarando.
En 2011 lanzamos desde RAP la iniciativa Acuerdos Básicos para el Tricentenario, con la idea de generar “grupos de trabajo verticales” sobre temas centrales para el desarrollo sustentable e inclusivo del país. El primero de los grupos lanzados fue con foco en Educación, y Juan fue nuestro primer “Asesor Académico”. Nos acompañó durante unos seis o siete años de ese trabajo en el cual se lograron consensos amplios sobre cómo encarar reformas del sistema educativo en sus distintas instancias y dimensiones. Como parte de este trabajo compartimos momentos de aprendizaje muy estimulantes, como estar en Finlandia para ver cómo forman a los docentes, en Brasil viendo cómo impulsaban escuelas de excelencia en las favelas, o en Chile para entender cómo se discutía una reforma universitaria.
Esas coincidencias raras que tiene la vida hicieron que estuviéramos en una reunión de trabajo con Juan justo en el momento emocionante en el cual se anuncia la elección de un argentino como Papa, y paradójicamente ambos parten el mismo día.
Saliendo de la pandemia Juan nos acompañó en el desarrollo de lo que terminó siendo el documento consensuado de Acuerdos Básicos para hacerle frente a los desafíos sociales y económicos del país, subscripto por más de 200 políticos de nuestra comunidad, y participó de los primeros grupos de trabajo para profundizar los lineamientos recomendados en el mismo.
Hace unos cuatro años, Juan tuvo un gesto que marca el tipo de persona que fue: pidió dar un paso al costado acompañando y apoyando nuestros grupos de trabajo, consciente que temas de salud estaban afectando su capacidad de colaborar en la forma en la cual él quería y solía hacerlo.
El 25 de abril de 2022, al cierre de nuestro Encuentro Cuatrimestral, tuvimos la suerte de poder generar un espacio de reconocimiento y agradecimiento a Juan por su enorme compromiso y colaboración con RAP. Recuerdo vivamente la imagen de Juan subiendo al escenario y todos de pie aplaudiéndolo durante varios minutos.
Juan tenía un enorme compromiso con nuestra querida Argentina. Fue una persona que propiciaba en su trabajo siempre la excelencia y la búsqueda de la verdad, para a partir de allí contribuir a cómo encarar los múltiples desafíos que enfrenta el país. Los títulos de algunos de sus libros lo dicen todo: El país de las desmesuras; Claves del retraso y del progreso de la Argentina; En busca de los acuerdos perdidos; El desafío de la equidad educativa; Educación para todos; En pos de la equidad; Otro siglo, otra Argentina; Un trabajo para todos; Reconstrucción o estancamiento.
Fue una persona abierta al diálogo y a los intercambios de opiniones con una enorme calidez y gran apego al respeto y a las buenas formas. Fue una persona de una integridad y honestidad encomiables.
Juan fue, por sobre todas las cosas, un caballero y una gran persona; un GRANDE en todo el sentido de la palabra. Juan querido, gracias por todo lo que nos diste, que en paz descanses, te vamos a extrañar.
Alan Clutterbuck (Director General de RAP)
Conocí a Juan en 1981, cuando él fue mi profesor de Economía Argentina en tercer año de la carrera de economía en la UCA. La vida después hizo que nuestros caminos se entrecruzaran en distintos ámbitos y contextos; durante su gestión pública en los 90’s, trabajando juntos en Coloquios de IDEA y en eventos de ACDE por esos tiempos, entre tantos otros.
En el 2003 cuando creamos RAP, al poco tiempo conformamos lo que llamamos un “Consejo Asesor” del cual Juan fue uno de sus primeros miembros. Desde ese ámbito nos apoyó y acompañó en forma desinteresada y comprometida con su experiencia, visión y análisis durante muchos años para ayudarnos en la construcción que estábamos encarando.
En 2011 lanzamos desde RAP la iniciativa Acuerdos Básicos para el Tricentenario, con la idea de generar “grupos de trabajo verticales” sobre temas centrales para el desarrollo sustentable e inclusivo del país. El primero de los grupos lanzados fue con foco en Educación, y Juan fue nuestro primer “Asesor Académico”. Nos acompañó durante unos seis o siete años de ese trabajo en el cual se lograron consensos amplios sobre cómo encarar reformas del sistema educativo en sus distintas instancias y dimensiones. Como parte de este trabajo compartimos momentos de aprendizaje muy estimulantes, como estar en Finlandia para ver cómo forman a los docentes, en Brasil viendo cómo impulsaban escuelas de excelencia en las favelas, o en Chile para entender cómo se discutía una reforma universitaria.
Esas coincidencias raras que tiene la vida hicieron que estuviéramos en una reunión de trabajo con Juan justo en el momento emocionante en el cual se anuncia la elección de un argentino como Papa, y paradójicamente ambos parten el mismo día.
Saliendo de la pandemia Juan nos acompañó en el desarrollo de lo que terminó siendo el documento consensuado de Acuerdos Básicos para hacerle frente a los desafíos sociales y económicos del país, subscripto por más de 200 políticos de nuestra comunidad, y participó de los primeros grupos de trabajo para profundizar los lineamientos recomendados en el mismo.
Hace unos cuatro años, Juan tuvo un gesto que marca el tipo de persona que fue: pidió dar un paso al costado acompañando y apoyando nuestros grupos de trabajo, consciente que temas de salud estaban afectando su capacidad de colaborar en la forma en la cual él quería y solía hacerlo.
El 25 de abril de 2022, al cierre de nuestro Encuentro Cuatrimestral, tuvimos la suerte de poder generar un espacio de reconocimiento y agradecimiento a Juan por su enorme compromiso y colaboración con RAP. Recuerdo vivamente la imagen de Juan subiendo al escenario y todos de pie aplaudiéndolo durante varios minutos.
Juan tenía un enorme compromiso con nuestra querida Argentina. Fue una persona que propiciaba en su trabajo siempre la excelencia y la búsqueda de la verdad, para a partir de allí contribuir a cómo encarar los múltiples desafíos que enfrenta el país. Los títulos de algunos de sus libros lo dicen todo: El país de las desmesuras; Claves del retraso y del progreso de la Argentina; En busca de los acuerdos perdidos; El desafío de la equidad educativa; Educación para todos; En pos de la equidad; Otro siglo, otra Argentina; Un trabajo para todos; Reconstrucción o estancamiento.
Fue una persona abierta al diálogo y a los intercambios de opiniones con una enorme calidez y gran apego al respeto y a las buenas formas. Fue una persona de una integridad y honestidad encomiables.
Juan fue, por sobre todas las cosas, un caballero y una gran persona; un GRANDE en todo el sentido de la palabra. Juan querido, gracias por todo lo que nos diste, que en paz descanses, te vamos a extrañar.
Alan Clutterbuck (Director General de RAP)